Su legado se trataba de cómo la construcción actual de la sociedad es la responsable de que cada vez veamos más disrupciones en las maneras de vivir de los seres humanos. Las brechas se hacen cada vez más visibles, los ricos acumulan cada vez más, la desigualdad se acentúa, y solo vemos como día a día las cosas empeoran. Aunque esto tiene un tono muy fatalista (Mario se caracteriza por su postura mordaz e hiperrealista de la sociedad), no es difícil comprender esa posición, incluso en palabras de Vicente quien se desempeña como profesor de sociología en la universidad, donde si bien estudia con recurrencia las condiciones de la sociedad, hace análisis, estadísticas y publica muchos trabajos al respecto, viven una realidad hipócrita alejada de eso que estudian, con comodidades, donde no tienen la menor idea de lo que esa población marginada vive, y de la cual asimila y vive en carne propia al enterarse del fallecimiento de su tío.